Lo siguiente es un extracto del Diario Parlamentario del Senado Mexicano:
En el gran esfuerzo por aumentar los niveles de competitividad en el país, mejorar la tecnología existente y el mercado nacional e internacional, encontramos como una muy buena área de oportunidad el impulso, la promoción y la permanencia de las empresas que operan bajo el programa de Maquila bajo la modalidad de “Shelter“.
Un servicio de Shelter se refiere básicamente a entidades legales que residen en el territorio nacional. Estas entidades, que han aprobado un programa de operación IMMEX (Maquila), celebran contratos con empresas extranjeras que proporcionan tecnología, materiales, maquinaria y equipo, mientras que las entidades que operan bajo el programa de maquila (IMMEX) ofrecen la infraestructura corporativa necesaria para llevar a cabo operaciones industriales o de servicio en México. Esto incluye brindar apoyo laboral, legal, contable, fiscal y administrativo, así como las instalaciones necesarias, junto con servicios de adaptación y mantenimiento.
Con estos elementos, la empresa que opera el Servicio de Shelter importa y exporta materias primas y componentes, los transporta a sus instalaciones, donde se llevan a cabo actividades industriales, y exporta el producto terminado o semiprocesado, realizando todo el trabajo logístico y obteniendo todos los permisos y registros necesarios para su operación.
Las empresas extranjeras que contratan los Servicios de Shelter en México encuentran una parte confiable con experiencia en la gestión local de negocios ante las autoridades administrativas y laborales, que cuentan con la experiencia en la administración de los recursos humanos necesarios para el desarrollo de actividades industriales y de servicios. Durante un periodo específico, estas empresas brindan apoyo a compañías extranjeras para facilitar el movimiento de bienes y servicios, reduciendo riesgos y costos operativos.
De esta manera, tienen la oportunidad de aprender la forma de “hacer negocios en México”, con la perspectiva de independizarse mediante la creación de una subsidiaria propia. En la mayoría de los casos, esto implica la expansión de sus actividades, generando mayor empleo y valor agregado, y transfiriendo tecnología que contribuye a la competitividad del país.
Este tipo de negocio se recomienda ampliamente para cualquier empresa extranjera de cualquier país que tenga la intención de llevar a cabo procesos de fabricación básicos, intermedios o consolidados o proporcionar servicios de exportación, como los denominados “back rooms” o “centros de llamadas”, que podrían incluir servicios administrativos, contables, actividades financieras, promoción empresarial, penetración en el mercado y soporte al consumidor.
Por lo tanto, es una manera muy conveniente de “aprender” a invertir en México mediante un proceso de “aclimatación” seguro, que los exime de la responsabilidad de asumir directamente la operación total, al tiempo que mantienen el control de su negocio principal (producción o servicios), con la presencia, si así lo desean, de su personal técnico o de gestión.
